Greg Land es un dibujante americano de cómics, nacido en el año 1963 y envuelto en una polémica muy particular, ya que su arte se basa básicamente en el calcado de fotogramas, fotografías y dibujos (propios o de otra gente).
Es cierto (y tampoco es ningún secreto) que los artistas de este medio (y de otros), recurren casi siempre a las fotografías para conseguir material visual de referencia y así facilitarse las cosas cuando abordan sus dibujos o ilustraciones… Pero en Greg Land, este comportamiento va aún más lejos y no sólo usa las imágenes como referencia, sino como modelo exacto para calcar y colocarlo directamente en la viñeta.
¿Es esto malo?... ¡Hombre!... Si queréis "perder" el tiempo buscando más información sobre el tema en Internet, podéis hacerlo, pero aquí os lo resumo en un momento: Mucha gente se muestra indignadísima ante este hecho y se atreve a llamar al señor Land (sin ningún tipo de escrúpulo) cosas como “vergonzoso timador”, “falso artista”, “dibujante pésimo”, etc…
Yo voy a llevarles a todos ellos un poco la contraria, más que nada para que no todos opinen lo mismo y crear un poco de controversia.
Pero permitidme un pequeño inciso antes de razonar mi opinión.
Los primeros dibujos de Greg Land que vi, fue en su trabajo de Ultimate Fantastic Four, en la historia que supondría la precuela de lo que posteriormente serían los Marvel Zombies. Personalmente, me quedé acojonado por el realismo de los dibujos y por la calidad del coloreado.
Así que, enamorado por estos dibujos, me dirigí a mi tienda de cómics favorita y me hice con más material de este dibujante. Compré los cuatro números de Sojourn, una colección inconclusa en España, pero que me llenaba lo suficiente como para ver más cosas del autor. Sojourn también me conquistó.
Posteriormente conseguí más cómics y me fijé en que los dibujos resultaban demasiado parecidos, con unas mujeres impresionantes y con la boca siempre abierta (en unas expresiones faciales demasiado parecidas)… Me empecé a “mosquear” un poquito, pero bueno, lo perdonaba porque el dibujo era acojonante… ¡Y el coloreado una puta gozada!
Y ahora salgo del inciso y comienzo con mis razonamientos para daros a entender porqué pienso que Land no es tan “vergonzoso”.
Es cierto que esta actividad de “copiado masivo” que hace Greg Land podría llevarnos a pensar que estamos ante un tramposo, pero hay una cosa que sí deberíamos tener en cuenta antes de juzgar a este dibujante: Si copiar es una labor tan sencilla y que cualquier inútil podría realizar, ¿porqué estoy convencido de que si doy una misma foto a diez personas y les digo que la calquen, el resultado va a ser de ocho copias pésimas, una mala y otra pasable?
¡Sí, señores!... Hasta para copiar hay que tener talento… Y eso os lo dice un tipo que ha estudiado Bellas Artes: Calcar no es tan fácil como la gran mayoría de vosotros piensa.
Además, si consideramos a un “copión” como un tipo que no es un “artista”, ¿qué pensaríamos de Leonardo da Vinci?... ¿Sabíais que utilizaba una cámara obscura enorme para copiar perspectivas?... ¿Eso le convierte en un timador de la pintura renacentista?...
Ya en la actualidad, tampoco deberíamos olvidarnos del PhotoShop y de la cantidad de gente que lo utiliza para "dibujar"… ¿Sabíais que trabajan directamente con fotografías a las que meten filtros y demás para realizar unas composiciones alucinantes?
¿Porqué Leonardo da Vinci y los ilustradores digitales son considerados artistas?... ¿Porqué a Greg Land se le niega esa categoría y se le define simplemente como un vulgar copión?
¿Acaso no hacen lo mismo unos y otros?
No nos deberíamos olvidar que, en este mundo para realizar la labor que sea, el ser humano usa las herramientas necesarias para facilitar su trabajo. Es decir:
¿A un matemático le podemos echar en cara que use una calculadora?... ¡Joder!... ¿No ha estado estudiando la ciencia de los números y las operaciones durante un montón de años?... ¿Para qué demonios usa una maldita calculadora?... ¡Que use su cerebro y no haga trampas!
¿Y un obrero de la construcción?... ¿Porqué utiliza un martillo neumático para romper las piedras?... ¡Que no sea tramposo y utilice un martillo de los de toda la vida y esté golpeando horas y horas hasta romper el suelo!... O mejor aún… Que sea un “auténtico” obrero y use una piedra para golpear a las otras…
Creo que me he explicado de sobra.
Nunca entenderé porqué la gente externa al mundo del arte, utiliza la copia como un arma para desprestigiar al artista, cuando en realidad, el acto de copiar, simplifica y reduce de forma significativa el trabajo y el esfuerzo a realizar (al igual que si cogieramos una calculadora o un martillo neumático).
Copiar (o calcar, me da igual) no es malo… El problema puede venir cuando todo se lleva al extremo y se termina por abusar de esta herramienta.
Y de esto, peca un poco el señor Greg Land… Y es lo que se le podría achacar en cierto modo: El abuso.
Aquí os pongo un ejemplo de esa copia abusiva que suele realizar sobre sí mismo. En la primera imagen veremos la portada especial del número 500 de Uncanny X Men y en las tres siguientes, un detalle de la primera imagen y después dibujos realizados por Greg Land para otros cómics, que "encajan" perfectamente con los modelos... O lo que es lo mismo: Calca descaradamente sus propios dibujos y los reutiliza todo lo que puede.
No obstante, yo sigo viendo sus viñetas y me siguen encantando sus dibujos. Bien es cierto que muchas de las expresiones faciales de sus personajes son incorrectas y que en este aspecto se lo podría trabajar un poco más (logrando un mayor realismo con la escena narrada), pero bueno…
Recordando la webs que he estado leyendo y en las que arremetían contra Greg Land, una de las preguntas que se hacían era la siguiente: ¿Cómo Marvel o DC puede permitir que un dibujante de esta calaña se encuentre entre sus artistas más destacados?
Muy sencillo.
Greg Land vende… Y mucho… Así que no será tan “malo”…
No obstante, el dibujo de Greg Land no sería tan bueno si a su lado no se encontrasen los coloristas que se encargan de terminar su trabajo. Estas personas son unos auténticos profesionales que se encargan de hacer de cada viñeta una pequeña obra de arte y me atrevería a decir que, sin estos artistas como la copa de un pino (y a la que muy poca gente valora su trabajo, por considerarlo algo que debe estar ahí, “sí o sí”) el dibujo (o copia, como queráis) de Greg Land no sería ni la mitad de interesante.
El problema de Greg Land (que lo tiene como todo creativo) no es el de la copia en sí, sino el de la comodidad que te da la copia, o lo que es lo mismo: Se apoltrona, volviéndose un descuidado… Y eso sí que está mal.
Por ejemplo:
Como ya hemos visto, se copia a sí mismo en un mismo cómic, en el que podremos encontrar caras y posiciones de personajes que recicla una y otra vez.
Falta de consistencia en las expresiones o en el aspecto físico de un personaje de una viñeta a otra (en una el personaje aparece con el pelo liso y en la siguiente con el pelo ondulado; una supuesta cara de enfado en verdad es una de éxtasis; etc…).
En esta viñeta de ejemplo que os pongo decidme qué expresión tiene Magneto: ¿Enfado o éxtasis antes del orgasmo?
Copia sin complejos las imágenes de otros artistas del cómic, sin ni siquiera indicar que es un homenaje al arte de “tal “ o “Pascual” (que no es que sea malo, pero sí que puede resultar un poco falta de respeto hacia el trabajo de otro).
Calca muchísimas imágenes de revistas y películas de corte pornográfico.
¿Cómo?... ¿¿Porno??...
¡Pues sí!... Y aunque esto último no me parece malo, sí que explicaría los motivos por los que muchos de sus personajes femeninos tienen esa cara de querer chupar ciertas cosas, o de estar recibiendo de lo suyo por determinado sitio.
Y ya para terminar, vuelvo a insistir en lo mismo (poniendo otros ejemplos): No es que sea malo que Greg Land calque a lo bestia… Lo malo es que se ha acomodado, volviéndose un descuidado (y eso sí que es realmente malo).
En la primera imagen, podemos ver al personaje de Spider-Woman (abajo, en el centro-izquierda). El problema es que a la pobre mujer no le han dibujado las piernas.
En la segunda imagen todo parece normal pero, si nos fijamos en Lobezno, las proporciones que tiene con el resto de sus compañeros es diferente, de tal modo que si se pusiera de pie, sería bastante más alto que el propio Coloso (y todos sabemos que en el cómic, Logan es un "taponcete", aunque en el cine lo interprete Hugh Jackman, un tío que mide 1,89 cm).
En la tercera imagen hay un par de errores debidos al "calco" indiscriminado sin tener en cuenta los detalles. A las dos mujeres que se encuentran al fondo (la de la izquierda, con cola y agachada; la de la derecha, con una serpiente en los brazos) les falta respectivamente por dibujar, una parte del cuerpo y una pierna.
En fin... Aún así me sigue encantando este tío.
Es cierto (y tampoco es ningún secreto) que los artistas de este medio (y de otros), recurren casi siempre a las fotografías para conseguir material visual de referencia y así facilitarse las cosas cuando abordan sus dibujos o ilustraciones… Pero en Greg Land, este comportamiento va aún más lejos y no sólo usa las imágenes como referencia, sino como modelo exacto para calcar y colocarlo directamente en la viñeta.
¿Es esto malo?... ¡Hombre!... Si queréis "perder" el tiempo buscando más información sobre el tema en Internet, podéis hacerlo, pero aquí os lo resumo en un momento: Mucha gente se muestra indignadísima ante este hecho y se atreve a llamar al señor Land (sin ningún tipo de escrúpulo) cosas como “vergonzoso timador”, “falso artista”, “dibujante pésimo”, etc…
Yo voy a llevarles a todos ellos un poco la contraria, más que nada para que no todos opinen lo mismo y crear un poco de controversia.
Pero permitidme un pequeño inciso antes de razonar mi opinión.
Los primeros dibujos de Greg Land que vi, fue en su trabajo de Ultimate Fantastic Four, en la historia que supondría la precuela de lo que posteriormente serían los Marvel Zombies. Personalmente, me quedé acojonado por el realismo de los dibujos y por la calidad del coloreado.
Así que, enamorado por estos dibujos, me dirigí a mi tienda de cómics favorita y me hice con más material de este dibujante. Compré los cuatro números de Sojourn, una colección inconclusa en España, pero que me llenaba lo suficiente como para ver más cosas del autor. Sojourn también me conquistó.
Posteriormente conseguí más cómics y me fijé en que los dibujos resultaban demasiado parecidos, con unas mujeres impresionantes y con la boca siempre abierta (en unas expresiones faciales demasiado parecidas)… Me empecé a “mosquear” un poquito, pero bueno, lo perdonaba porque el dibujo era acojonante… ¡Y el coloreado una puta gozada!
Y ahora salgo del inciso y comienzo con mis razonamientos para daros a entender porqué pienso que Land no es tan “vergonzoso”.
Es cierto que esta actividad de “copiado masivo” que hace Greg Land podría llevarnos a pensar que estamos ante un tramposo, pero hay una cosa que sí deberíamos tener en cuenta antes de juzgar a este dibujante: Si copiar es una labor tan sencilla y que cualquier inútil podría realizar, ¿porqué estoy convencido de que si doy una misma foto a diez personas y les digo que la calquen, el resultado va a ser de ocho copias pésimas, una mala y otra pasable?
¡Sí, señores!... Hasta para copiar hay que tener talento… Y eso os lo dice un tipo que ha estudiado Bellas Artes: Calcar no es tan fácil como la gran mayoría de vosotros piensa.
Ya en la actualidad, tampoco deberíamos olvidarnos del PhotoShop y de la cantidad de gente que lo utiliza para "dibujar"… ¿Sabíais que trabajan directamente con fotografías a las que meten filtros y demás para realizar unas composiciones alucinantes?
¿Porqué Leonardo da Vinci y los ilustradores digitales son considerados artistas?... ¿Porqué a Greg Land se le niega esa categoría y se le define simplemente como un vulgar copión?
¿Acaso no hacen lo mismo unos y otros?
No nos deberíamos olvidar que, en este mundo para realizar la labor que sea, el ser humano usa las herramientas necesarias para facilitar su trabajo. Es decir:
¿A un matemático le podemos echar en cara que use una calculadora?... ¡Joder!... ¿No ha estado estudiando la ciencia de los números y las operaciones durante un montón de años?... ¿Para qué demonios usa una maldita calculadora?... ¡Que use su cerebro y no haga trampas!
¿Y un obrero de la construcción?... ¿Porqué utiliza un martillo neumático para romper las piedras?... ¡Que no sea tramposo y utilice un martillo de los de toda la vida y esté golpeando horas y horas hasta romper el suelo!... O mejor aún… Que sea un “auténtico” obrero y use una piedra para golpear a las otras…
Creo que me he explicado de sobra.
Nunca entenderé porqué la gente externa al mundo del arte, utiliza la copia como un arma para desprestigiar al artista, cuando en realidad, el acto de copiar, simplifica y reduce de forma significativa el trabajo y el esfuerzo a realizar (al igual que si cogieramos una calculadora o un martillo neumático).
Copiar (o calcar, me da igual) no es malo… El problema puede venir cuando todo se lleva al extremo y se termina por abusar de esta herramienta.
Y de esto, peca un poco el señor Greg Land… Y es lo que se le podría achacar en cierto modo: El abuso.
Aquí os pongo un ejemplo de esa copia abusiva que suele realizar sobre sí mismo. En la primera imagen veremos la portada especial del número 500 de Uncanny X Men y en las tres siguientes, un detalle de la primera imagen y después dibujos realizados por Greg Land para otros cómics, que "encajan" perfectamente con los modelos... O lo que es lo mismo: Calca descaradamente sus propios dibujos y los reutiliza todo lo que puede.
No obstante, yo sigo viendo sus viñetas y me siguen encantando sus dibujos. Bien es cierto que muchas de las expresiones faciales de sus personajes son incorrectas y que en este aspecto se lo podría trabajar un poco más (logrando un mayor realismo con la escena narrada), pero bueno…
Recordando la webs que he estado leyendo y en las que arremetían contra Greg Land, una de las preguntas que se hacían era la siguiente: ¿Cómo Marvel o DC puede permitir que un dibujante de esta calaña se encuentre entre sus artistas más destacados?
Muy sencillo.
Greg Land vende… Y mucho… Así que no será tan “malo”…
No obstante, el dibujo de Greg Land no sería tan bueno si a su lado no se encontrasen los coloristas que se encargan de terminar su trabajo. Estas personas son unos auténticos profesionales que se encargan de hacer de cada viñeta una pequeña obra de arte y me atrevería a decir que, sin estos artistas como la copa de un pino (y a la que muy poca gente valora su trabajo, por considerarlo algo que debe estar ahí, “sí o sí”) el dibujo (o copia, como queráis) de Greg Land no sería ni la mitad de interesante.
El problema de Greg Land (que lo tiene como todo creativo) no es el de la copia en sí, sino el de la comodidad que te da la copia, o lo que es lo mismo: Se apoltrona, volviéndose un descuidado… Y eso sí que está mal.
Por ejemplo:
Como ya hemos visto, se copia a sí mismo en un mismo cómic, en el que podremos encontrar caras y posiciones de personajes que recicla una y otra vez.
En esta viñeta de ejemplo que os pongo decidme qué expresión tiene Magneto: ¿Enfado o éxtasis antes del orgasmo?
Copia sin complejos las imágenes de otros artistas del cómic, sin ni siquiera indicar que es un homenaje al arte de “tal “ o “Pascual” (que no es que sea malo, pero sí que puede resultar un poco falta de respeto hacia el trabajo de otro).
Calca muchísimas imágenes de revistas y películas de corte pornográfico.
¿Cómo?... ¿¿Porno??...
¡Pues sí!... Y aunque esto último no me parece malo, sí que explicaría los motivos por los que muchos de sus personajes femeninos tienen esa cara de querer chupar ciertas cosas, o de estar recibiendo de lo suyo por determinado sitio.
Y ya para terminar, vuelvo a insistir en lo mismo (poniendo otros ejemplos): No es que sea malo que Greg Land calque a lo bestia… Lo malo es que se ha acomodado, volviéndose un descuidado (y eso sí que es realmente malo).
En la primera imagen, podemos ver al personaje de Spider-Woman (abajo, en el centro-izquierda). El problema es que a la pobre mujer no le han dibujado las piernas.
En la segunda imagen todo parece normal pero, si nos fijamos en Lobezno, las proporciones que tiene con el resto de sus compañeros es diferente, de tal modo que si se pusiera de pie, sería bastante más alto que el propio Coloso (y todos sabemos que en el cómic, Logan es un "taponcete", aunque en el cine lo interprete Hugh Jackman, un tío que mide 1,89 cm).
En la tercera imagen hay un par de errores debidos al "calco" indiscriminado sin tener en cuenta los detalles. A las dos mujeres que se encuentran al fondo (la de la izquierda, con cola y agachada; la de la derecha, con una serpiente en los brazos) les falta respectivamente por dibujar, una parte del cuerpo y una pierna.
En fin... Aún así me sigue encantando este tío.
Django está desencadenado... ¡Pues tira de la cadena del váter, que huele mal!...
Hay una cosa cierta y evidente: Quentin Tarantino está enamorado de los años 60 y 70, y se empeña en hacérnoslo ver una y otra vez en todas sus películas… Y no es que me parezca mal, pero es que al final cuando me enfrento a cualquiera de sus Films, no sé a ciencia cierta lo que estoy viendo.
Para explicarme, os pongo un ejemplo de una de sus películas, Malditos Bastardos (Inglourious Basterds, 2009)… La película trata sobre una “miembra” (esa palabra no existe, ¿porqué se la inventó esa "miembra" de la política?... ¿Para igualar los géneros y luchar contra el machismo?) de la resistencia y un pelotón de soldados que terminan por converger en un cine en el que van a matar a Hitler. La película está ambientada en la Segunda Guerra Mundial, rodada en el siglo XXI pero con el espíritu artificial del Spaghetti Western y los films de los 70.
¡Joder!... Es como si vas a un restaurante y pides un buen chuletón y al cocinero se le ocurre añadir a la carne una salsa especial realizada con ketchup, pescado, arándanos y dos rodajas de limón.
¿Le da riqueza a la carne el tener una salsa realizada con tantos sabores?... Pues riqueza más bien poca ya que la mezcla que te llevas a la boca resulta asquerosa al no poder identificar ningún sabor en particular.
Así es Tarantino y su filmografía: Una mezcolanza sin sentido de montón de gaitas que saben a demasiadas cosas y, por consiguiente, no saben a nada… Y en Django Desencadenado ocurre lo mismo: Resulta una película insulsa y sin identidad (a no ser que la mezcla de ingredientes “sin ton ni son” se considere un estilo y una seña de identidad, en cuyo caso, Tarantino es el rey).
Hay una cosa cierta y evidente: Quentin Tarantino está enamorado de los años 60 y 70, y se empeña en hacérnoslo ver una y otra vez en todas sus películas… Y no es que me parezca mal, pero es que al final cuando me enfrento a cualquiera de sus Films, no sé a ciencia cierta lo que estoy viendo.
Para explicarme, os pongo un ejemplo de una de sus películas, Malditos Bastardos (Inglourious Basterds, 2009)… La película trata sobre una “miembra” (esa palabra no existe, ¿porqué se la inventó esa "miembra" de la política?... ¿Para igualar los géneros y luchar contra el machismo?) de la resistencia y un pelotón de soldados que terminan por converger en un cine en el que van a matar a Hitler. La película está ambientada en la Segunda Guerra Mundial, rodada en el siglo XXI pero con el espíritu artificial del Spaghetti Western y los films de los 70.
¡Joder!... Es como si vas a un restaurante y pides un buen chuletón y al cocinero se le ocurre añadir a la carne una salsa especial realizada con ketchup, pescado, arándanos y dos rodajas de limón.
¿Le da riqueza a la carne el tener una salsa realizada con tantos sabores?... Pues riqueza más bien poca ya que la mezcla que te llevas a la boca resulta asquerosa al no poder identificar ningún sabor en particular.
Así es Tarantino y su filmografía: Una mezcolanza sin sentido de montón de gaitas que saben a demasiadas cosas y, por consiguiente, no saben a nada… Y en Django Desencadenado ocurre lo mismo: Resulta una película insulsa y sin identidad (a no ser que la mezcla de ingredientes “sin ton ni son” se considere un estilo y una seña de identidad, en cuyo caso, Tarantino es el rey).
"La extrajo de la caja con delicadeza, las manos le temblaban
mientras la sujetaba. Por un momento tuvo la impresión de que estaba
sosteniendo el cadáver de una mujer muy hermosa, y eso, por alguna
extraña razón, lo excitó".
Como si la soledad no fuera suficiente tortura, el informático Luis Aldana ha sido víctima de burlas, abusos y rechazos durante toda su vida.
Después de un problemático incidente en la oficina, decide olvidarse por completo de la gente y alejarse de la realidad adquiriendo una hermosa muñeca de silicona, con la que canaliza sus frustraciones, alivia su melancolía y cumple sus fantasías sexuales.
Todo parece cobrar sentido en la vida de Luis, aún con los ataques de locura, hasta que la irrupción de una bella mujer lo arrastra hacia un peligroso estado de confusión.
¿Será Aldana capaz de sobrellevar la confrontación entre su fantasía y la realidad? ¿Sucumbirá a la demencia o logrará superar las tribulaciones que le depara el destino?
Como si la soledad no fuera suficiente tortura, el informático Luis Aldana ha sido víctima de burlas, abusos y rechazos durante toda su vida.
Después de un problemático incidente en la oficina, decide olvidarse por completo de la gente y alejarse de la realidad adquiriendo una hermosa muñeca de silicona, con la que canaliza sus frustraciones, alivia su melancolía y cumple sus fantasías sexuales.
Todo parece cobrar sentido en la vida de Luis, aún con los ataques de locura, hasta que la irrupción de una bella mujer lo arrastra hacia un peligroso estado de confusión.
¿Será Aldana capaz de sobrellevar la confrontación entre su fantasía y la realidad? ¿Sucumbirá a la demencia o logrará superar las tribulaciones que le depara el destino?
Aquí os dejamos un pequeño checklist con los cómics del mes de mayo y junio que consideramos podrían ser muy buenas si queréis meteros en esto del mundo del cómic.
Os daréis cuenta de que algunas de nuestras recomendaciones son cómics que ya llevan tiempo en el mercado y que no son el primer número de ninguna colección... Que no os importe... Si lo recomendamos, es porque consideramos que tanto ese número, como los anteriores, debería tener un hueco en vuestras librerías.
En fín, aquí comenzamos el...
Os daréis cuenta de que algunas de nuestras recomendaciones son cómics que ya llevan tiempo en el mercado y que no son el primer número de ninguna colección... Que no os importe... Si lo recomendamos, es porque consideramos que tanto ese número, como los anteriores, debería tener un hueco en vuestras librerías.
En fín, aquí comenzamos el...
¡Pues sí, señoras y señores!... ¡Estos dos mastuerzos por fin tienen el par de sendas tablets de diez pulgadas que siempre se han merecido!...
Aunque bueno, en verdad uno de ellos ya disponía de uno de de estos dispositivos desde hacía un año, pero les seguía faltando otro aparato de estos para decir lo que siempre han querido y no podían…
¡¡Tenemos tablets!!
Aunque bueno, en verdad uno de ellos ya disponía de uno de de estos dispositivos desde hacía un año, pero les seguía faltando otro aparato de estos para decir lo que siempre han querido y no podían…
¡¡Tenemos tablets!!
Hagamos un pequeño y breve repaso a la historia del cómic americano en España.
Fui de esos individuos que se crió con los cómics de Forum en los años 80, aunque alguna vez cayó en mi poder algún tomo de bolsillo de la editorial Bruguera (los famosos Pocket de Ases), de esos que te regalaban los vecinos del tercero, ya que su hijo se había hecho mayor (vamos, que había cambiado los tebeos por faldas) y como sabían que yo era un consumidor de nato viñetas, pues me los daban con todo el cariño del mundo (supongo que así también se ahorraban el paso de tirarlos a la basura, aunque esto es pensar bastante mal de ellos… En verdad eran muy simpáticos).
Personalmente estos cómics de Bruguera no me entusiasmaban demasiado: Eran pequeños y no se leían todo lo bien que uno querría, pero bueno… ¡Eran cómics!
El tiempo siguió su curso y pasé de ser un chavalito imbécil a convertirme en un adolescente más subnormal todavía (los peinados de la época eran bastante ridículos vistos hoy en día y las gafas… Pues bueno… En aquellos años, los miopes solíamos llevar unas gafas más grandes que nuestras propias cabezas… Y tampoco era yo demasiado espabilado, que todo hay que decirlo).
Fue entonces cuando me hablaron de unos cómics de superhéroes del año de la polka, en blanco y negro (que ya empezaban a considerarse como piezas de coleccionista, entre los admiradores más rabiosos del mundo del cómic americano).
Estos cómics pertenecían a…
Fui de esos individuos que se crió con los cómics de Forum en los años 80, aunque alguna vez cayó en mi poder algún tomo de bolsillo de la editorial Bruguera (los famosos Pocket de Ases), de esos que te regalaban los vecinos del tercero, ya que su hijo se había hecho mayor (vamos, que había cambiado los tebeos por faldas) y como sabían que yo era un consumidor de nato viñetas, pues me los daban con todo el cariño del mundo (supongo que así también se ahorraban el paso de tirarlos a la basura, aunque esto es pensar bastante mal de ellos… En verdad eran muy simpáticos).
Personalmente estos cómics de Bruguera no me entusiasmaban demasiado: Eran pequeños y no se leían todo lo bien que uno querría, pero bueno… ¡Eran cómics!
El tiempo siguió su curso y pasé de ser un chavalito imbécil a convertirme en un adolescente más subnormal todavía (los peinados de la época eran bastante ridículos vistos hoy en día y las gafas… Pues bueno… En aquellos años, los miopes solíamos llevar unas gafas más grandes que nuestras propias cabezas… Y tampoco era yo demasiado espabilado, que todo hay que decirlo).
Fue entonces cuando me hablaron de unos cómics de superhéroes del año de la polka, en blanco y negro (que ya empezaban a considerarse como piezas de coleccionista, entre los admiradores más rabiosos del mundo del cómic americano).
Estos cómics pertenecían a…
Bueno, pues como véis, de “rankings” va la cosa y hoy vamos a tratar un tema muy interesante para toda la sociedad.
¿No os habéis preguntado nunca por aquellos superhéroes de los que sus creadores reniegan?
Yo diría que esto puede deberse a varios motivos (lo de que sus creadores renieguen del personaje, porque la "criaturita" en cuestión se las trae) pero... ¿Por qué coño me preguntáis cosas?
Pues eso, mantened la boca cerrada y leed este interesante post.
Se abrió la caja de los truenos con el Top 10 de tías buenas en videojuegos y yo me veo en la obligación moral de abriros los ojos e informaros de que nuestras amadas editoriales comiqueras de tanto en tanto, también han metido la pata hasta el corvejón con algunos de sus chicos con mallas.
¡¡Vamos con ellos!!
¿No os habéis preguntado nunca por aquellos superhéroes de los que sus creadores reniegan?
Yo diría que esto puede deberse a varios motivos (lo de que sus creadores renieguen del personaje, porque la "criaturita" en cuestión se las trae) pero... ¿Por qué coño me preguntáis cosas?
Pues eso, mantened la boca cerrada y leed este interesante post.
Se abrió la caja de los truenos con el Top 10 de tías buenas en videojuegos y yo me veo en la obligación moral de abriros los ojos e informaros de que nuestras amadas editoriales comiqueras de tanto en tanto, también han metido la pata hasta el corvejón con algunos de sus chicos con mallas.
¡¡Vamos con ellos!!
Los años 80 nos brindaron una serie de cómics buenísimos, llenos de aventuras increíbles y de personajes carismáticos. Esta historietas son imposibles de olvidar hoy en día y aún siguen manteniendo ese germen de diversión tras treinta años a sus espaldas.
Los 80 fueron increíbles años de gran creatividad y de ideas geniales que germinaban en unas historias con un interesante transfondo (que no sólo se quedaban en la superficie), o aventuras que sencillamente se internaban en el aspecto del entretenimiento puro y duro para hacer pasar un buen rato al lector. Y lo más importante: Nos trajeron la evolución madura de la figura del superhéroe.
Varios ejemplos de cómics geniales de esta época son los siguientes (aunque no todos, por supuesto): Daredevil, de Frank Miller (Born Again, resulta impresionante); El regreso del señor de la noche, de Frank Miller (una revisión adulta de Batman que se convertiría en la base para todas sus sucesivas historias); Watchmen, de Alan Moore (de una profundidad intelectual bestial); Los cuatro fantásticos, de John Byrne; etc...
Tampoco voy a seguir citando y citando cómics, porque los que sepan del tema ya saben a lo que me refiero y los que no, pues bueno… No quiero aburrirlos con un listado de obras que no les va a aportar nada.
Los 80 fueron increíbles años de gran creatividad y de ideas geniales que germinaban en unas historias con un interesante transfondo (que no sólo se quedaban en la superficie), o aventuras que sencillamente se internaban en el aspecto del entretenimiento puro y duro para hacer pasar un buen rato al lector. Y lo más importante: Nos trajeron la evolución madura de la figura del superhéroe.
Varios ejemplos de cómics geniales de esta época son los siguientes (aunque no todos, por supuesto): Daredevil, de Frank Miller (Born Again, resulta impresionante); El regreso del señor de la noche, de Frank Miller (una revisión adulta de Batman que se convertiría en la base para todas sus sucesivas historias); Watchmen, de Alan Moore (de una profundidad intelectual bestial); Los cuatro fantásticos, de John Byrne; etc...
Tampoco voy a seguir citando y citando cómics, porque los que sepan del tema ya saben a lo que me refiero y los que no, pues bueno… No quiero aburrirlos con un listado de obras que no les va a aportar nada.
Era una funda para libretas, como las que se pueden comprar en las tiendas de efectos militares. En el frente llevaba el escudo de la academia de suboficiales y debajo, bordado en letras amarillas, estaba escrito Sgto. Ayora. Cuando salían de la academia todos se hacían bordar una de esas, él también había tenido una.
Despegó el velcro y la abrió. En la izquierda había varios bolsillos y funditas para tarjetas, en la derecha había una libreta tamaño cuartilla. Tenía hojas que no pertenecían a la misma y que sobresalían por las tapas abultando la libreta de forma anómala, la abrió al azar por la mitad...
Despegó el velcro y la abrió. En la izquierda había varios bolsillos y funditas para tarjetas, en la derecha había una libreta tamaño cuartilla. Tenía hojas que no pertenecían a la misma y que sobresalían por las tapas abultando la libreta de forma anómala, la abrió al azar por la mitad...
Este cómic salió allá por diciembre del año 2003, publicado por Norma Editorial, y está escrito y dibujado por alguien a quien considero un genio en este mundillo: Darwyn Cooke.
Este artista lo tuvo muy difícil para ingresar en el mundo del comic-book mainstream, ya que su estilo de dibujo, tipo cartoon, hacía que las grandes compañías le cerraran las puertas. Pero en los años 90, Bruce Timm se fijó en él y le contrató para realizar los storyboards de las series de dibujos animados de Batman y de Superman. Al finalizar la década, se había convertido en uno de los principales animadores de la serie Batman Beyond. Gracias a esto, DC se fijó en su obra y en el año 2000 publicó Batman: Ego. A partir de entonces, Darwin Cooke no ha dejado de trabajar para Marvel y DC.
Este artista lo tuvo muy difícil para ingresar en el mundo del comic-book mainstream, ya que su estilo de dibujo, tipo cartoon, hacía que las grandes compañías le cerraran las puertas. Pero en los años 90, Bruce Timm se fijó en él y le contrató para realizar los storyboards de las series de dibujos animados de Batman y de Superman. Al finalizar la década, se había convertido en uno de los principales animadores de la serie Batman Beyond. Gracias a esto, DC se fijó en su obra y en el año 2000 publicó Batman: Ego. A partir de entonces, Darwin Cooke no ha dejado de trabajar para Marvel y DC.
Aquí vuelvo de nuevo al tema del videojuego de Tomb Raider tras la promesa que os había hecho en un post anterior, aunque os juro que aquí abandono el tema para centrarme en otras cosas, como cómics y demás…
¡Pero es que el juego que os voy a comentar, se las trae!… ¡¡Es que es muy, pero que muy bueno!!
En fin, comienzo...
¡Pero es que el juego que os voy a comentar, se las trae!… ¡¡Es que es muy, pero que muy bueno!!
En fin, comienzo...
Allí estaba Lual, en el bar de siempre y con la mirada perdida, levantando la mano a Virgil, un irlandés dueño del local que parecía no haberse dado cuenta de las señales de Lual para ser atendido (o no quería darse cuenta). Con un gran estruendo, la puerta del garito se abrió, pasando por ella Emde, que lucía una sonrisa de lo más satisfecha mientras se dirigía a la barra, levantando pecho.
― ¡Aupa, Lual!
― ¡Hola, tío!
―¡Buenos días nos dé el Señor, Virgil! ―Emde levantó la mano con energía, en una mezcla de efusivo saludo y gesto para que el camarero se acercara. Al moverse el irlandés, Lual miró su brazo, levantado un minuto antes, y después hizo lo propio con el de su amigo… ¿Porqué a Emde siempre le hacían caso y a él le ignoraban?
―¿Qué quiere el señorito?
―Para mí un café solo y para mi amigo de mirada perdida, un helado de fresa… Con doble de nata ¡¡por supuesto!!
―Hoy no quiero helado.
―¡No jodas!
―Ya me gustaría… Hoy creo que tomaré un café como el tuyo… Quizá ya va siendo hora de que me convierta en un hombre de tu entereza.
―¿Estás seguro?... Te informo de que ser como yo, requiere de un conocimiento de la masculinidad supino.
―¿Y en qué consiste eso?
―¡¡Ah, pequeño colibrí!!... ¡Ahora te lo voy a contar!
―Si no hay más remedio…
― ¡Aupa, Lual!
― ¡Hola, tío!
―¡Buenos días nos dé el Señor, Virgil! ―Emde levantó la mano con energía, en una mezcla de efusivo saludo y gesto para que el camarero se acercara. Al moverse el irlandés, Lual miró su brazo, levantado un minuto antes, y después hizo lo propio con el de su amigo… ¿Porqué a Emde siempre le hacían caso y a él le ignoraban?
―¿Qué quiere el señorito?
―Para mí un café solo y para mi amigo de mirada perdida, un helado de fresa… Con doble de nata ¡¡por supuesto!!
―Hoy no quiero helado.
―¡No jodas!
―Ya me gustaría… Hoy creo que tomaré un café como el tuyo… Quizá ya va siendo hora de que me convierta en un hombre de tu entereza.
―¿Estás seguro?... Te informo de que ser como yo, requiere de un conocimiento de la masculinidad supino.
―¿Y en qué consiste eso?
―¡¡Ah, pequeño colibrí!!... ¡Ahora te lo voy a contar!
―Si no hay más remedio…
El otro día me paré a pensar en qué nueva sección "fija" se podría crear para el blog y hacerlo así más entretenido para vosotros (algo así como los Trending Bloggic, que empezaron como una anécdota tonta pero que se han asentado de un modo "definitivo" en el blog).
Lo cierto es que no se me ocurría nada (quizá porque tenía fiebre y cuando uno está así pues... ¡Vamos!... Que no le llega demasiada sangre al cerebro de uno para imaginar cosas). Así que al final me dediqué a navegar por Internet, porque es una de las cosas que suele hacer la gente cuando está enferma y tirada en el sofá con escalofríos y una fiebre de caballo (o de pony, según lo adulto que sea cada uno)... Bueno, en realidad, las personas en ese estado suelen hacer más cosas. Las enumero:
- Visitar páginas web en el portátil.
- Ver películas de DVD, BluRay o pirateadas (porque las cadenas de televisión sólo emiten mierda).
- Jugar con la videoconsola (ya sea portátil o grande).
- Leer un libro (o un ebook, si la persona en cuestión se ha modernizado).
. Leer un cómic (o una tablet, si la persona es "super-mega-chachi-guay").
- Etc...
Por supuesto, el teléfono móvil y el fijo (que ahora son todos sin cables) descansan a nuestro lado sobre un cojín del sofá, una vieja manta nos cubre de arriba a abajo (excepto la punta de los pies, para que nos entre el "fresquito"), un paquete de Kleenex para los mocos y poco más...
En fin... Que me estoy desviando del tema y tampoco es cuestión de irse por las ramas.
Nos habíamos quedado en que estaba buscando una nueva sección que añadir el blog y que, por la enfermedad, no tenía el cerebro para muchas ideas. Entonces entré en Internet y buscando información para unos videojuegos, me encontré con esto...
Lo cierto es que no se me ocurría nada (quizá porque tenía fiebre y cuando uno está así pues... ¡Vamos!... Que no le llega demasiada sangre al cerebro de uno para imaginar cosas). Así que al final me dediqué a navegar por Internet, porque es una de las cosas que suele hacer la gente cuando está enferma y tirada en el sofá con escalofríos y una fiebre de caballo (o de pony, según lo adulto que sea cada uno)... Bueno, en realidad, las personas en ese estado suelen hacer más cosas. Las enumero:
- Visitar páginas web en el portátil.
- Ver películas de DVD, BluRay o pirateadas (porque las cadenas de televisión sólo emiten mierda).
- Jugar con la videoconsola (ya sea portátil o grande).
- Leer un libro (o un ebook, si la persona en cuestión se ha modernizado).
. Leer un cómic (o una tablet, si la persona es "super-mega-chachi-guay").
- Etc...
Por supuesto, el teléfono móvil y el fijo (que ahora son todos sin cables) descansan a nuestro lado sobre un cojín del sofá, una vieja manta nos cubre de arriba a abajo (excepto la punta de los pies, para que nos entre el "fresquito"), un paquete de Kleenex para los mocos y poco más...
En fin... Que me estoy desviando del tema y tampoco es cuestión de irse por las ramas.
Nos habíamos quedado en que estaba buscando una nueva sección que añadir el blog y que, por la enfermedad, no tenía el cerebro para muchas ideas. Entonces entré en Internet y buscando información para unos videojuegos, me encontré con esto...
Lara Croft, la arqueóloga del mundo de los videojuegos por excelencia, ha regresado a las consolas de nueva generación con una historia que narra, a modo de precuela, las aventuras que convirtieron a esta mujer en el carismático personaje que vendió millones de copias de su primer juego, allá por el año 1996.
Tras unas últimas secuelas bastante tristes, este último Tomb Raider consigue revivir la franquicia con un juego impresionante, tanto a nivel de interés, como gráfico y de jugabilidad.
Pero antes de hablar de esta increible aventura, hagamos un repaso a la historia de los juegos de la sexy arqueóloga.
Tras unas últimas secuelas bastante tristes, este último Tomb Raider consigue revivir la franquicia con un juego impresionante, tanto a nivel de interés, como gráfico y de jugabilidad.
Pero antes de hablar de esta increible aventura, hagamos un repaso a la historia de los juegos de la sexy arqueóloga.
Punisher (en su versión adulta), guionizado por Garth Ennis para la línea editorial Marvel Max, es sin ninguna duda, el mejor acercamiento que hasta ahora se haya realizado sobre el torturado personaje de la calavera en el pecho... Y creedme si os digo que ya sé lo que estais pensando (soy así de genial)...
¡Ya esta el gafotas de Emde con sus verdades absolutas!
Pues escuchadme, piltrafillas... Os conozco de sobra y sabía que me íbais a venir con alguna tontería de esas, así que me he preparado una contestación que os dejará sin argumentos...
¡¡EL GAFOTAS DEL BLOG ES MAESE LUAL!!
Sé que a vosotros esto os va a disgustar, pero no os preocupéis... Tito Emde os guiará por el camino de la verdad e intentará argumentaros el porqué de esta afirmación (no la de que Lual es un gafotas "marisabidillo", de esa no me móveis ni con grúa)... Tito Emde os hará ver la de la grandeza de este cómic.
Bienvenidos al mundo de...
Sé que soy un “pesao” ensalzando siempre las cualidades de Garth Ennis... ¡¡Pero es que el tío es muy bueno!!
En fin, os cuento un poco de historia personal para que entendáis esta actitud mía, que más se asemeja a la de una “groupie” histérica, que a la del consumado crítico que soy...
Para mí, el personaje de Frank Castle (alias Punisher, alias Castigador) no se encontraba entre mis favoritos. Es más: me la traía “al pairo”.
Por supuesto había leído algunas historias sobre él, pero más que nada cuando actuaba de comparsa de otros héroes Marvel, como Daredevil (que sí me gustaba), Spiderman (que dejó de gustarme y explicaré el porqué en algún otro post, cuando tenga ganas), etc... Personalmente, me parecía un personaje de lo más plano, un tipo que había jurado odio eterno a los “malosos” de turno y poco más.
Y fue entonces cuando la cagaron más con él y a algún guionista se le ocurrió la genial idea de matarlo y resucitarlo, convirtiéndolo en una especie de ángel vengador (posteriormente retomarían esa idea para asesinarle de nuevo y transformarlo en una especie de Frankenstein "no muerto", hecho de retales y movido por una gema mística). De verdad que todo aquello para nada ayudaba a que le encontrase el "punto" al vengador de la calavera.
Mi opinión sobre él no pasaba de mirar unas pocas páginas en nuestra tienda de cómics de guardia y tras pensar “¡Vaya gilipollez!”, cerrar el cómic y gastarme las “perras” en algo de más enjundia (Predicador, por ejemplo).
Los gerifaltes de Marvel verían que esos extraños cambios en la vida de Frank Castle no estaban teniendo la repercusión que ellos se esperaban (supongo que más a tenor de las ventas, que de la calidad) y decidieron dar al público algo más interesante que un ex-soldado de Vietnam, con dos ridículas "alitas" de ángel en la espalda y un armamento de lo más mortífero entre las manos.
Así que se creó el sello editorial Marvel Knights.
Marvel Knights, nacía con la intención de ser un sello más adulto, donde se contasen historias alejadas de lo que se suponía era el canon superheroico tradicional, y donde tuvieran cabida autores que, en principio, hubiera sido difícil imaginar trabajando para Marvel. El intento de crear un grupo con alguno de los principales protagonistas del sello Marvel Knights se desarrollo a lo largo de dos volúmenes (estando el segundo inédito en España, el primero de 15 números de duración si vió la luz al completo en nuestro pais).
En fin... Este intento de montar un grupo "seriote", con superhéroes en horas bajas o de difícil salida comercial (como el caso de Punisher), no terminó de llegar tampoco a buen puerto.
Las razones pudieron ser varias: Villanos ridículos para unas tramas que apostaban por la seriedad y el dramatismo; incompatibilidad de caracteres entre los protagonistas (¿qué coño pinta Punisher metido en “fregaos” con “mindundis” como Capa y Puñal?).
Vamos, que la serie y la idea de otro grupo superheroico nuevo (por muy adulto que pretendiera ser) duró lo que duró: Poco.
Pero esta propuesta tuvo su parte positiva y los mandamases de Marvel supieron ver más allá de sus narices... ¿A qué me refiero con esto?... Muy sencillo: Se percataron de que personajes como Frank Castle, funcionaban mucho mejor para un público adulto.
¿Y qué hace una editorial cuando quiere darle un toque adulto a un personaje que ha caído casi en desgracia?
Llamar a Garth Ennis.
¿Y qué ocurre cuando llamas al señor Garth Ennis?
Pues que se trae a su “coleguita” Steve Dillon y junto a él, crean esta maravilla.
MARVEL KNIGHTS: PUNISHER
Frank Castle vive en un deteriorado apartamento bajo el seudónimo de señor "Smith", junto a un grupo de vecinos excéntricos, pero bienintencionados, Spacker Dave (un fanático de los "piercings"), el señor Bumpo (un obeso mórbido) y Joan (una pobre chica con mas valor dentro del que ella cree)... A partir de aquí, en secreto, dirige su guerra contra el crimen.
Bobby Gnucci, miembro de la familia del crimen, inspecciona el cadáver de su hermano, recientemente asesinado. En un ataque por sorpresa, Punisher acaba con Bobby. Al parecer, el plan actual de Frank Castle es acabar con los Gnucci uno a uno. Su próximo objetivo es Carlo Gnucci y se pone al día con él, en el Empire State Building, lanzándolo desde lo alto. Punisher está de vuelta en Nueva York y hay mucho hijo puta al que castigar.
Solo la etapa de Ennis con Dillon en el sello Marvel Knights merecería un post aparte, pero como lo que nos ocupa es la etapa bajo el sello Max del personaje, voy a procurar extenderme lo menos posible.
Solo deciros que, en una serie de buenisimos arcos argumentales (dentro de Marvel Knights), el genio norirlandés dió la vuelta a un personaje (que a nivel ventas estaba en caída libre), dotando a las historias de una gran calidad argumental con tramas descacharrantes (rebosantes de violencia, humor negro y grandes dosis de mala leche) y con personajes increiblemente absurdos (asesinos rusos con una talla 150 de busto, capos de la mafia femeninos sin brazos ni piernas, detectives súper “desgraciaos”, barmans "malencaraos"), etc...
En fin: El mundo de Ennis.
Pero nuestro buen Garth quería ir mucho más allá (en la que ya consideraba su creación) y quería quitarse de encima el lastre de tener a su personaje en un mundo donde al final, los tíos con mallas arreglaban las situaciones. Quería ver a Frank Castle en un mundo real.
Y entonces sucedió que Crom (o cualquier otro dios) escuchó sus plegarias y al poco tiempo vió la luz el sello Marvel Max (que nació con la sana intención de combatir a su rival directo: la editorial DC y su línea adulta Vertigo), donde la visión de Ennis sobre Punisher (demasiado violenta y cruda incluso para Marvel Knights) tiene perfecta cabida.
Ennis se puso las pilas y, tras su primer trabajo en Max con una miniserie dedicada a Nick Furia, comenzó los guiones de Frank Castle, perpetrando la mejor etapa del antihéroe de la calavera.
Y como mas vale una reseña de Tito Emde (con imagen incluida) que mil palabras y además me caeis bastante bien, voy a haceros un resumen rápido de cada uno de los tomos que abarcan esta gloriosa etapa.
PUNISHER MAX 01: EN EL PRINCIPIO
El arranque del primer volumen no deja lugar a dudas de lo muy en serio que va Ennis con el personaje. Con objeto de acabar de una vez por todas con la mayoría de miembros de la mafia italiana que operan en su ciudad Frank asalta la celebración del centenario del Don y mata de un plumazo (en una escena magistral, puntualizada por los pensamientos de nuestro protagonista) a la práctica totalidad de los criminales que, de una manera u otra marcan la pauta de la vida de muchos civiles. A partir de ahí, Ennis envuelve a Castle en una operación gubernamental secreta que pretende captar sus exclusivos servicios usando para ello a Micro (un antiguo colaborador).
No quiero destriparos la trama, pero solo os diré que Ennis utiliza este tomo para cortar de forma magistral y definitiva los lazos con todo lo que hayamos podido leer sobre el personaje, dejándonos listos y sin lastres para lo que se avecina.
PUNISHER MAX 02: COCINA IRLANDESA
Para el segundo tomo no deja lugar a dudas acerca de lo que nos vamos a encontrar. Ennis echa mano de toda la mala uva que le caracteriza y nos narra el enfrentamiento entre Punisher y una banda de antiguos miembros del I.R.A (y algunos chalados varios) con ansias de poder.
Al igual que en el primero, Ennis presenta personajes secundarios, de cuya repercusión nos iremos dando cuenta trás la lectura de varios arcos argumentales. Esto es muy difícil de lograr a nivel narrativo pero el tipo este lo consigue en todo momento.
PUNISHER MAX 03: MADRE RUSIA
Nick Furia (en su acertada versión Max) propone a Castle una misión suicida en Rusia. Os aseguro que el baño de sangre y la acción adrenalínica están aseguradas, porque aquí nos encontramos con un Frank Castle convertido en un soldado de Vietnam en estado puro y en su hábitat natural: La guerra. Mientras tanto, Ennis sigue sumergiéndonos en interesantisimas subtramas de secundarios (cuyas personalidades van adquiriendo forma), así como la presentación de nuevos personajes a cual más cruel e increíblemente verosímil.
PUNISHER MAX 04: ARRIBA ES ABAJO Y NEGRO ES BLANCO
En el cuarto tomo regresamos a la trama con la que arrancó la serie, un mafioso superviviente de la masacre y que entre los suyos esta considerado como demasiado peligroso, se juega sus bazas contra Castle. Resulta increíble las múltiples nemesis que encontraremos de nuestro héroe en todo momento y que están a la altura sin caer nunca en el ridículo (como sí que les pasa mas frecuentemente de lo deseable a los enemigos de los tipos enfundados en pijamas chillones).
En la obra de Ennis no encontraremos sentimentalismos ni tonterías por el estilo. Tanto los héroes como los villanos que aparecen en los cómics, saben el juego en el que están metidos (mafiosos, militares, mercenarios, chicas con ganas de venganza, etc...) y ejecutan su papel con total precisión y sin piedad.
Así que no es de extrañar que nos encontremos con viñetas en las que las situaciones narradas sean duras y reales, como si estuvieran interpretadas por personajes igualmente reales.
Y esta forma real de abordar a los personajes y las situaciones tiene un efecto refrescante en el lector, pues no tiene que enfrentarse a esos remordimientos superheróicos absurdos, ni sentirse machacado constantemente porque "un gran poder conlleva una gran responsabilidad" (eso sin contar con los múltiples lloros consiguientes por el padre o el tío bonachón muertos).
PUNISHER MAX 05: LOS ESCLAVISTAS
En el quinto tomo se nos presenta otra cruda realidad de nuestros dias: La trata de blancas. Una mujer aterrorizada cuenta su historia a Punisher. Poco después los perseguidores de esta mujer (que se dedican a secuestrar chicas para acabar vendiéndolas en los burdeles de Nueva York) pasan a estar en el punto de mira del justiciero. Los fríos y crueles traficantes de seres humanos (veteranos del genocidio étnico de los Balcanes) se las tendrán que ver con nuestro héroe.
PUNISHER MAX 06: BARRACUDA
El sexto arco se mete de lleno con las grandes multinacionales (como veis Ennis no deja titére con cabeza) y lo que promete a priori parece ser un arco argumental para tomarse un respiro, se convierte en uno de los mejores momentos de la saga... ¿Por qué?... Porque se nos presenta a uno de los villanos más hijo putas y creibles de la historia del noveno arte. Es un placer presentaros a...
¡¡BARRACUDA!!
Barracuda es sin duda el enemigo más peligroso que Frank Castle se haya encontrado y probablemente se encuentre en toda su singladura. Este personaje es un militar (como él), metódico (como él), tremendamente efectivo cuando de matar se trata (como él), despiadado (como él)... Y un infinito catálogo más de similitudes como las de nuestro héroe. Tan buena fue la definición de la archinémesis de nuestro torturado castigador, que mereció miniserie propia la cual no está nada mal.
PUNISHER MAX 07: HOMBRE DE PIEDRA
El séptimo tomo nos brinda la oportunidad de volver a ver enfrentados a Castle contra el general Zakharov. Para ello, volvemos de nuevo a la trama contada en el tercer tomo para continuar con esta historia, centrada en la consiguiente venganza que el militar ruso quiere inflijir al único hombre que le ha vencido. La acción y los litros de sangre salpicarán las montañas afganas, que es donde se desarrolla la acción de este tomo.
PUNISHER MAX 08: LAS VIUDAS
Llegamos al octavo tomo... Y al que posiblemente sea el más flojo de todos (aunque así y todo, una lectura altamente recomendable). En su lucha contra el crimen, Punisher dejó viudas a cinco esposas de mafiosos y para ellas, Frank Castle no es mas que un carnicero sanguinario y están dispuestas a pagarle con la misma moneda y triunfar donde sus maridos fracasaron. Como dato interesante de este arco, Ennis nos da ciertas pinceladas de lo que sería una versión femenina de Punisher.
PUNISHER MAX 09: LA LARGA Y FRIA OSCURIDAD
En este noveno tomo vuelve Barracuda y pasa lo que tiene que pasar cuando dos fuerzas de la naturaleza chocan. Porque cuando el más salvaje enemigo de Frank sobrevivió a un grupo de hambrientos tiburones y escapó de una muerte segura por inanición, sólo puede tener una idea en la cabeza para volver a enfrentarse contra Punisher: Volver armado hasta los dientes con un plan cuidadosamente trazado y acabar con el hombre que más odia sobre la faz de la Tierra. Barracuda tiene algo con lo que disparar a Frank allí donde sabe que más le dolerá.
Y aquí os dejo una imagen como ejemplo (más que nada porque dicen que vale más que mil palabras y me quiero ahorrar ese tiempo, tecleando delante de la pantalla del ordenador).
La violencia que va a destilar este noveno tomo en cada una de sus viñetas os tendrá todo el rato con la boca abierta, porque sencillamente es... ¡¡Acojoneibol!!
PUNISHER MAX 10: VALLEY FORGE, VALLEY FORGE
Y Ennis (como no podria ser de otra manera) se despide de Punisher por la puerta grande, dejando al personaje en lo mas alto. En esta ocasión, Castle tendrá que enfrentarse a sus demonios de Vietnam e intentar no "cepillarse" a unos soldados de la fuerza Delta que intentan cazarle, debido a una serie de órdenes dictaminadas por unos cuantos dudosos generales... Así que Frank deberá utilizar métodos disuasorios y no letales, mientras los Delta le quieren atrapar.
Aparte de estos diez insuperables tomos escritos por Garth Ennis, también existen algunos especiales guionizados por él, pero creo que he argumentado de sobra los motivos de mi entusiasmo ante una obra de tal magnitud, así que no voy a incidir en ellos.
También podría entrar en las motivaciones que otorga Ennis a este personaje para obligarle a hacer lo que hace...
Pero eso os lo dejo a vosotros: Leedlo y descubridlo por vosotros mismos.
¡Ya esta el gafotas de Emde con sus verdades absolutas!
Pues escuchadme, piltrafillas... Os conozco de sobra y sabía que me íbais a venir con alguna tontería de esas, así que me he preparado una contestación que os dejará sin argumentos...
¡¡EL GAFOTAS DEL BLOG ES MAESE LUAL!!
Sé que a vosotros esto os va a disgustar, pero no os preocupéis... Tito Emde os guiará por el camino de la verdad e intentará argumentaros el porqué de esta afirmación (no la de que Lual es un gafotas "marisabidillo", de esa no me móveis ni con grúa)... Tito Emde os hará ver la de la grandeza de este cómic.
Bienvenidos al mundo de...
Sé que soy un “pesao” ensalzando siempre las cualidades de Garth Ennis... ¡¡Pero es que el tío es muy bueno!!
En fin, os cuento un poco de historia personal para que entendáis esta actitud mía, que más se asemeja a la de una “groupie” histérica, que a la del consumado crítico que soy...
Para mí, el personaje de Frank Castle (alias Punisher, alias Castigador) no se encontraba entre mis favoritos. Es más: me la traía “al pairo”.
Por supuesto había leído algunas historias sobre él, pero más que nada cuando actuaba de comparsa de otros héroes Marvel, como Daredevil (que sí me gustaba), Spiderman (que dejó de gustarme y explicaré el porqué en algún otro post, cuando tenga ganas), etc... Personalmente, me parecía un personaje de lo más plano, un tipo que había jurado odio eterno a los “malosos” de turno y poco más.
Y fue entonces cuando la cagaron más con él y a algún guionista se le ocurrió la genial idea de matarlo y resucitarlo, convirtiéndolo en una especie de ángel vengador (posteriormente retomarían esa idea para asesinarle de nuevo y transformarlo en una especie de Frankenstein "no muerto", hecho de retales y movido por una gema mística). De verdad que todo aquello para nada ayudaba a que le encontrase el "punto" al vengador de la calavera.
Mi opinión sobre él no pasaba de mirar unas pocas páginas en nuestra tienda de cómics de guardia y tras pensar “¡Vaya gilipollez!”, cerrar el cómic y gastarme las “perras” en algo de más enjundia (Predicador, por ejemplo).
Los gerifaltes de Marvel verían que esos extraños cambios en la vida de Frank Castle no estaban teniendo la repercusión que ellos se esperaban (supongo que más a tenor de las ventas, que de la calidad) y decidieron dar al público algo más interesante que un ex-soldado de Vietnam, con dos ridículas "alitas" de ángel en la espalda y un armamento de lo más mortífero entre las manos.
Así que se creó el sello editorial Marvel Knights.
Las razones pudieron ser varias: Villanos ridículos para unas tramas que apostaban por la seriedad y el dramatismo; incompatibilidad de caracteres entre los protagonistas (¿qué coño pinta Punisher metido en “fregaos” con “mindundis” como Capa y Puñal?).
Vamos, que la serie y la idea de otro grupo superheroico nuevo (por muy adulto que pretendiera ser) duró lo que duró: Poco.
Pero esta propuesta tuvo su parte positiva y los mandamases de Marvel supieron ver más allá de sus narices... ¿A qué me refiero con esto?... Muy sencillo: Se percataron de que personajes como Frank Castle, funcionaban mucho mejor para un público adulto.
¿Y qué hace una editorial cuando quiere darle un toque adulto a un personaje que ha caído casi en desgracia?
Llamar a Garth Ennis.
¿Y qué ocurre cuando llamas al señor Garth Ennis?
Pues que se trae a su “coleguita” Steve Dillon y junto a él, crean esta maravilla.
MARVEL KNIGHTS: PUNISHERFrank Castle vive en un deteriorado apartamento bajo el seudónimo de señor "Smith", junto a un grupo de vecinos excéntricos, pero bienintencionados, Spacker Dave (un fanático de los "piercings"), el señor Bumpo (un obeso mórbido) y Joan (una pobre chica con mas valor dentro del que ella cree)... A partir de aquí, en secreto, dirige su guerra contra el crimen.
Bobby Gnucci, miembro de la familia del crimen, inspecciona el cadáver de su hermano, recientemente asesinado. En un ataque por sorpresa, Punisher acaba con Bobby. Al parecer, el plan actual de Frank Castle es acabar con los Gnucci uno a uno. Su próximo objetivo es Carlo Gnucci y se pone al día con él, en el Empire State Building, lanzándolo desde lo alto. Punisher está de vuelta en Nueva York y hay mucho hijo puta al que castigar.
Solo la etapa de Ennis con Dillon en el sello Marvel Knights merecería un post aparte, pero como lo que nos ocupa es la etapa bajo el sello Max del personaje, voy a procurar extenderme lo menos posible.
Solo deciros que, en una serie de buenisimos arcos argumentales (dentro de Marvel Knights), el genio norirlandés dió la vuelta a un personaje (que a nivel ventas estaba en caída libre), dotando a las historias de una gran calidad argumental con tramas descacharrantes (rebosantes de violencia, humor negro y grandes dosis de mala leche) y con personajes increiblemente absurdos (asesinos rusos con una talla 150 de busto, capos de la mafia femeninos sin brazos ni piernas, detectives súper “desgraciaos”, barmans "malencaraos"), etc...
En fin: El mundo de Ennis.
Pero nuestro buen Garth quería ir mucho más allá (en la que ya consideraba su creación) y quería quitarse de encima el lastre de tener a su personaje en un mundo donde al final, los tíos con mallas arreglaban las situaciones. Quería ver a Frank Castle en un mundo real.
Y entonces sucedió que Crom (o cualquier otro dios) escuchó sus plegarias y al poco tiempo vió la luz el sello Marvel Max (que nació con la sana intención de combatir a su rival directo: la editorial DC y su línea adulta Vertigo), donde la visión de Ennis sobre Punisher (demasiado violenta y cruda incluso para Marvel Knights) tiene perfecta cabida.
Ennis se puso las pilas y, tras su primer trabajo en Max con una miniserie dedicada a Nick Furia, comenzó los guiones de Frank Castle, perpetrando la mejor etapa del antihéroe de la calavera.
Y como mas vale una reseña de Tito Emde (con imagen incluida) que mil palabras y además me caeis bastante bien, voy a haceros un resumen rápido de cada uno de los tomos que abarcan esta gloriosa etapa.
El arranque del primer volumen no deja lugar a dudas de lo muy en serio que va Ennis con el personaje. Con objeto de acabar de una vez por todas con la mayoría de miembros de la mafia italiana que operan en su ciudad Frank asalta la celebración del centenario del Don y mata de un plumazo (en una escena magistral, puntualizada por los pensamientos de nuestro protagonista) a la práctica totalidad de los criminales que, de una manera u otra marcan la pauta de la vida de muchos civiles. A partir de ahí, Ennis envuelve a Castle en una operación gubernamental secreta que pretende captar sus exclusivos servicios usando para ello a Micro (un antiguo colaborador).
No quiero destriparos la trama, pero solo os diré que Ennis utiliza este tomo para cortar de forma magistral y definitiva los lazos con todo lo que hayamos podido leer sobre el personaje, dejándonos listos y sin lastres para lo que se avecina.
Para el segundo tomo no deja lugar a dudas acerca de lo que nos vamos a encontrar. Ennis echa mano de toda la mala uva que le caracteriza y nos narra el enfrentamiento entre Punisher y una banda de antiguos miembros del I.R.A (y algunos chalados varios) con ansias de poder.
Al igual que en el primero, Ennis presenta personajes secundarios, de cuya repercusión nos iremos dando cuenta trás la lectura de varios arcos argumentales. Esto es muy difícil de lograr a nivel narrativo pero el tipo este lo consigue en todo momento.
Nick Furia (en su acertada versión Max) propone a Castle una misión suicida en Rusia. Os aseguro que el baño de sangre y la acción adrenalínica están aseguradas, porque aquí nos encontramos con un Frank Castle convertido en un soldado de Vietnam en estado puro y en su hábitat natural: La guerra. Mientras tanto, Ennis sigue sumergiéndonos en interesantisimas subtramas de secundarios (cuyas personalidades van adquiriendo forma), así como la presentación de nuevos personajes a cual más cruel e increíblemente verosímil.
En el cuarto tomo regresamos a la trama con la que arrancó la serie, un mafioso superviviente de la masacre y que entre los suyos esta considerado como demasiado peligroso, se juega sus bazas contra Castle. Resulta increíble las múltiples nemesis que encontraremos de nuestro héroe en todo momento y que están a la altura sin caer nunca en el ridículo (como sí que les pasa mas frecuentemente de lo deseable a los enemigos de los tipos enfundados en pijamas chillones).
En la obra de Ennis no encontraremos sentimentalismos ni tonterías por el estilo. Tanto los héroes como los villanos que aparecen en los cómics, saben el juego en el que están metidos (mafiosos, militares, mercenarios, chicas con ganas de venganza, etc...) y ejecutan su papel con total precisión y sin piedad.
Así que no es de extrañar que nos encontremos con viñetas en las que las situaciones narradas sean duras y reales, como si estuvieran interpretadas por personajes igualmente reales.
Y esta forma real de abordar a los personajes y las situaciones tiene un efecto refrescante en el lector, pues no tiene que enfrentarse a esos remordimientos superheróicos absurdos, ni sentirse machacado constantemente porque "un gran poder conlleva una gran responsabilidad" (eso sin contar con los múltiples lloros consiguientes por el padre o el tío bonachón muertos).
En el quinto tomo se nos presenta otra cruda realidad de nuestros dias: La trata de blancas. Una mujer aterrorizada cuenta su historia a Punisher. Poco después los perseguidores de esta mujer (que se dedican a secuestrar chicas para acabar vendiéndolas en los burdeles de Nueva York) pasan a estar en el punto de mira del justiciero. Los fríos y crueles traficantes de seres humanos (veteranos del genocidio étnico de los Balcanes) se las tendrán que ver con nuestro héroe.
El sexto arco se mete de lleno con las grandes multinacionales (como veis Ennis no deja titére con cabeza) y lo que promete a priori parece ser un arco argumental para tomarse un respiro, se convierte en uno de los mejores momentos de la saga... ¿Por qué?... Porque se nos presenta a uno de los villanos más hijo putas y creibles de la historia del noveno arte. Es un placer presentaros a...
Barracuda es sin duda el enemigo más peligroso que Frank Castle se haya encontrado y probablemente se encuentre en toda su singladura. Este personaje es un militar (como él), metódico (como él), tremendamente efectivo cuando de matar se trata (como él), despiadado (como él)... Y un infinito catálogo más de similitudes como las de nuestro héroe. Tan buena fue la definición de la archinémesis de nuestro torturado castigador, que mereció miniserie propia la cual no está nada mal.
El séptimo tomo nos brinda la oportunidad de volver a ver enfrentados a Castle contra el general Zakharov. Para ello, volvemos de nuevo a la trama contada en el tercer tomo para continuar con esta historia, centrada en la consiguiente venganza que el militar ruso quiere inflijir al único hombre que le ha vencido. La acción y los litros de sangre salpicarán las montañas afganas, que es donde se desarrolla la acción de este tomo.
Llegamos al octavo tomo... Y al que posiblemente sea el más flojo de todos (aunque así y todo, una lectura altamente recomendable). En su lucha contra el crimen, Punisher dejó viudas a cinco esposas de mafiosos y para ellas, Frank Castle no es mas que un carnicero sanguinario y están dispuestas a pagarle con la misma moneda y triunfar donde sus maridos fracasaron. Como dato interesante de este arco, Ennis nos da ciertas pinceladas de lo que sería una versión femenina de Punisher.
En este noveno tomo vuelve Barracuda y pasa lo que tiene que pasar cuando dos fuerzas de la naturaleza chocan. Porque cuando el más salvaje enemigo de Frank sobrevivió a un grupo de hambrientos tiburones y escapó de una muerte segura por inanición, sólo puede tener una idea en la cabeza para volver a enfrentarse contra Punisher: Volver armado hasta los dientes con un plan cuidadosamente trazado y acabar con el hombre que más odia sobre la faz de la Tierra. Barracuda tiene algo con lo que disparar a Frank allí donde sabe que más le dolerá.
Y aquí os dejo una imagen como ejemplo (más que nada porque dicen que vale más que mil palabras y me quiero ahorrar ese tiempo, tecleando delante de la pantalla del ordenador).La violencia que va a destilar este noveno tomo en cada una de sus viñetas os tendrá todo el rato con la boca abierta, porque sencillamente es... ¡¡Acojoneibol!!
Y Ennis (como no podria ser de otra manera) se despide de Punisher por la puerta grande, dejando al personaje en lo mas alto. En esta ocasión, Castle tendrá que enfrentarse a sus demonios de Vietnam e intentar no "cepillarse" a unos soldados de la fuerza Delta que intentan cazarle, debido a una serie de órdenes dictaminadas por unos cuantos dudosos generales... Así que Frank deberá utilizar métodos disuasorios y no letales, mientras los Delta le quieren atrapar.
Aparte de estos diez insuperables tomos escritos por Garth Ennis, también existen algunos especiales guionizados por él, pero creo que he argumentado de sobra los motivos de mi entusiasmo ante una obra de tal magnitud, así que no voy a incidir en ellos.
También podría entrar en las motivaciones que otorga Ennis a este personaje para obligarle a hacer lo que hace...
Pero eso os lo dejo a vosotros: Leedlo y descubridlo por vosotros mismos.
